Por: Yezid Fernando Niño Barrero / Candidato a Doctor en Ingeniería - Industria y Organizaciones, Universidad Nacional de Colombia / Magíster en Salud Pública, Universidad Nacional de Colombia / Especialista en Higiene y Salud Ocupacional, Universidad Distrital Francisco José de Caldas / Ingeniero Ambiental y Sanitario, Universidad de la Salle / Consultor en Seguridad y Salud en el Trabajo / Ex Coordinador de Salud Ocupacional, Instituto Nacional de Cancerología / Asesor de la Dirección de Riesgos Laborales, Ministerio del Trabajo en el desarrollo normativo promovido por la Ley 1562 de 2012 en las normas del Sistema de Gestión de Seguridad y Salud en el Trabajo
En los lugares de trabajo ya sea en procesos industriales o de prestación de servicios, pueden existir un gran número de sustancias químicas, aunque algunas que se puedan considerar no peligrosas, hay otras que pueden tener diferentes peligros, algunos de mayor importancia que otros por sus posibles consecuencias sobre la salud, el ambiente y la infraestructura.
La herramienta fundamental para la identificación de estos peligros es el Sistema Globalmente Armonizado de clasificación y etiquetado de productos químicos (SGA) que fue desarrollado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con participación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
El SGA cuenta con criterios armonizados para la clasificación de los peligros de las sustancias químicas y define los elementos de comunicación de peligros que se incluyen en las etiquetas y las Fichas de Datos de Seguridad (FDS)1. Estos últimos son los mecanismos para poder llevar la información a trabajadores y empleadores sobre las características de peligrosidad de las sustancias y permite conocer recomendaciones en cuanto al uso, almacenamiento y eliminación de estas, entre otros.
Estos elementos de comunicación de peligros definidos en el SGA son principalmente los pictogramas de peligro (figura 1), palabra de advertencia (peligro o atención) y las indicaciones de peligro (frases H que describen la naturaleza del peligro). Estas indicaciones de peligro son frases armonizadas con un código que inicia con letra H y números que permiten definir el tipo y categoría de peligro (2: físicos, 3: salud, 4: ambiente).
Figura 1. Pictogramas de peligro del SGA. (Fuente: CCS)
Para mejor entendimiento, se proporcionan los siguientes ejemplos:
- Una sustancia que esté clasificada como líquido inflamable de la categoría 1 utilizará los elementos de comunicación de peligros de la figura 2a.
- Una sustancia que esté clasificada como tóxica aguda por ingestión de la categoría 2 utilizará los elementos de comunicación de peligros de la figura 2b.
Figura 2. Ejemplos de elementos de comunicación de peligros. (Fuente: el autor)
De acuerdo con lo definido en la regulación colombiana, es necesario medir las concentraciones de los agentes contaminantes en los ambientes de trabajo para lo cual es requerido la aplicación de métodos de higiene industrial que incluyen acciones como la definición de una estrategia de muestreo (número de muestras, tiempo de duración de cada una de ellas, ubicación, momento del muestreo, número de trabajadores a muestrear, número de jornadas y periodicidad del muestreo), proceso de toma de muestras (elección de la instrumentación y parámetros de muestreo adecuados), el análisis químico de las muestra, tratamiento de los datos y comparación con valores de exposición ocupacional (TLV de la ACGIH para Colombia).2
Este proceso puede ser dispendioso y en la mayoría de casos costoso, sobre todo, si se piensa evaluar la totalidad de productos químicos existentes en el lugar de trabajo. Es por esto, que se requiere la aplicación de metodologías que permitan de manera cualitativa, utilizando información de peligros de las sustancias químicas, priorizar aquellas sustancias que son de mayor relevancia para la exposición de los trabajadores.
Esta priorización se puede realizar aplicando metodologías simplificadas que han sido enfocadas para “determinar, sin recurrir de entrada a las mediciones ambientales, el nivel o grado de riesgo por exposición a agentes químicos en una determinada operación”2; con alcance a los siguientes aspectos:
- Contar con un diagnóstico inicial del nivel de riesgo por exposición inhalatoria, lo que permitirá definir en forma rápida la aplicación de métodos de control para minimizar o reducir la exposición de los trabajadores.
- Realizar evaluación previa antes de poner en operación un proceso con el fin de tomar las acciones preventivas correspondientes.
- Determinar la prioridad de sustancias químicas que deban ser incorporadas en procesos de evaluación de higiene industrial.
- Justificar documentalmente la no realización de mediciones ambientales.
Para la aplicación de este tipo de metodologías es necesario conocer algunos aspectos propios de las sustancias3 como lo son las propiedades físico-químicas, información toxicológica, peligros para la salud, valores límite de exposición ocupacional, vías de ingreso y demás información que deberá estar disponible en la FDS, así mismo, conocer aspectos relacionados con las condiciones de trabajo como el detalle del proceso, procedimientos y tareas de trabajo, cantidades y concentraciones utilizadas, forma en la que se emplea o está presente en el lugar de trabajo (aerosol, gas o vapor), condiciones propias de la tarea, controles implementados y su adecuado funcionamiento, número y tipo de trabajadores y contratistas expuestos, y tiempos y frecuencia de la exposición, etc.
Existen algunas metodologías que pueden ser utilizadas con este fin, por ejemplo:
COSHH Essentials. Establece consejos básicos sobre qué hacer para controlar la exposición a sustancias peligrosas en el lugar de trabajo. Toma la forma de consejos sencillos en hojas informativas llamadas "hojas de guía de control". Hay dos tipos de hojas, "hojas de consejos directos" específicas de la industria y "hojas de guía de control genéricas"4.
INRS. Es un modelo de evaluación del riesgo esperado (es decir, considerando las medidas preventivas ya presentes). Se estructura en tres fases: 1. Inventario de sustancias químicas, 2. Jerarquización de los riesgos potenciales, 3. Evaluación simplificada del riesgo por exposición inhalatoria 2.
Caja de herramientas de control químico de OIT. En Colombia se encuentra recomendado el uso de esta herramienta en la Guía de Atención Integral de Salud Ocupacional Basada en la Evidencia (GATISO) en particular en la de Asma Ocupacional. “La caja de herramientas se ha diseñado para identificar soluciones de control que brindan protección a la salud para la gran mayoría de la población trabajadora. Sin embargo, dentro de cualquier población habrá́ grupos de individuos susceptibles, tales como trabajadores jóvenes o de edad, al igual que mujeres en edad reproductiva o embarazadas que pueden requerir protección adicional cuando se exponen a materiales peligrosos específicos. En estos casos, es prudente tomar un enfoque de precaución mayor y evitar el contacto con la sustancia peligrosa o brindar un grado mayor de control. Este control adicional pudiera brindarse adoptando un enfoque más riguroso que las recomendaciones estándar de la caja de herramientas. Un esquema para la protección contra productos químicos nocivos y peligrosos en el lugar de trabajo, está diseñado para pequeñas y medianas empresas (PYME) en países en desarrollo” 5.
Recomendaciones para la aplicación de estas metodologías:
- No se debe desconocer que se requiere la medición mediante métodos específicos (higiene industrial) de las concentraciones en el ambiente de las sustancias de mayor importancia. Estos métodos no sustituyen la medición. Para estos casos se pueden definir Grupos de Exposición Similar (GES) definido cómo un conjunto de trabajadores que comparten un mismo perfil de exposición hacia un agente o conjunto de agentes6, lo que permitirá optimizar el uso de los recursos.
- Uno de los pasos fundamentales es identificar plenamente las sustancias químicas utilizadas. Para esto se debe hacer uso de las etiquetas y las fichas de datos de seguridad, asegurándose de tenerlas clasificadas con el Sistema Globalmente Armonizado.
- Una vez priorizadas las sustancias químicas se deben implementar controles de acuerdo con la jerarquía establecida en la regulación colombiana, priorizando en todo momento la posibilidad de eliminar el uso de cualquier sustancia peligrosa y dejando como última medida los Elementos de Protección Personal (EPP).
Referencias bibliográficas
1. Organización de las Naciones Unidas. Sistema globalmente armonizado de clasificación y etiquetado de productos químicos (SGA) Revisión 7. Ginebra; 2017. 581 p.
2. Cavallé Oller N. NTP 935: Agentes químicos: evaluación cualitativa y simplificada del riesgo por inhalación ( I ). Aspectos generales. Inst Nac Segur e Hig en el Trab. 2011;(I):1–6.
3. Rodríguez E, Gozalo C, Alonso M, Traspaderne J. Aplicación de métodos simplificados de evaluación del riesgo químico con efectos para la salud. Segur y salud en el Trab [Internet]. 2008;50:28–39. Available from: http://www.ladep.es/ficheros/documentos/Aplicación de métodos simplificados de evaluación del.pdf
4. HSE. COSHH Essentials - COSHH e-tool [Internet]. [cited 2018 May 27]. Available from: http://www.hse.gov.uk/coshh/essentials/
5. Ministerio de la Protección Social, Pontificia Universidad Javeriana. Guía de Atención Integral de Salud Ocupacional Basada en la Evidencia para Asma Ocupacional (GATISO-ASMA) [Internet]. Bogotá; 2007. 165 p. Available from: http://fondoriesgoslaborales.gov.co/documents/Publicaciones/Guias/Gatiso-Cancer-pulmon.pdf
6. Mulhausen J, Damiano J. Conformación de Grupos de Exposición Similar. In: 3a Edición. 2008.