Tomado de: Efectos económicos de futuras sequías en Colombia: Estimación a partir del Fenómeno El Niño 2015 / Documento 466 - Dirección de Estudios Económicos - 29 de noviembre de 2017 / Departamento Nacional de Planeación (DPN).
Eventos climáticos tales como El Niño y La Niña han mostrado la vulnerabilidad de Colombia ante fenómenos de carácter hidroclimático. Su ocurrencia en el pasado ha causado desastres que han generado cuantiosas pérdidas económicas y afectaciones tanto en la competitividad de los sectores como en las condiciones de vida de la población colombiana que se afecta por estos sucesos.
Cuantificar el impacto de estos eventos es crucial porque es posible que su frecuencia e intensidad aumenten en el tiempo (Cai et al, 2015). Estimar sus implicaciones económicas permite dimensionar, además, las pérdidas que el país tendría en el mediano y largo plazo si no se prepara y se adapta al cambio climático, o si no se gestionan los riesgos que se pueden materializar cuando se presenten eventos climáticos extremos.
Para Colombia, ya se han llevado a cabo ejercicios que valoran los daños y las pérdidas de un fenómeno de variabilidad climática como el de El Niño, el cual provoca una disminución en las precipitaciones durante la segunda temporada de lluvias del país1 y una acentuación de las temporadas secas. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), por ejemplo, utilizó la metodología de daños y pérdidas para valorar los efectos directos e indirectos de El Niño 1997 – 1998, sobre los sectores económicos (CEPAL, 1999). Sin embargo, el empleo de esta técnica puede estar sobreestimando los costos del fenómeno, en la medida en que las pérdidas calculadas pueden incorporar también los efectos de la coyuntura económica internacional y nacional que vivía el país en ese momento.
Dado lo anterior, este documento se concentra en cuantificar los posibles costos económicos para Colombia que dejarían futuros eventos de variabilidad climática, cuyas características, en términos de temperatura y precipitación, sean similares a las del más reciente fenómeno El Niño, ocurrido en 2015.
Para cumplir con el propósito establecido, las posibles pérdidas económicas de futuras sequías se estiman calculando los costos de El Niño 2015, que incluyen, los perjuicios que este fenómeno generó sobre los sectores económicos tradicionales, más las pérdidas económicas que causaron los incendios forestales. Los impactos económicos sobre las ramas de la economía se calcularon utilizando una matriz Insumo-Producto que incorpora el agua en todas sus modalidades (recurso hídrico, agua de acueducto y agua residual), y a la que se le aplicó un choque equivalente a la disminución del agua observada en el evento. Este choque se introdujo considerando que la disponibilidad de agua se ve afectada por el fenómeno El Niño; siendo este recurso materia prima de muchas actividades productivas, especialmente de los sectores eléctricos, de agua y agricultura.
Las pérdidas económicas relacionadas con los incendios forestales se cuantificaron a partir de la valoración económica que se hizo de los múltiples servicios ecosistémicos2 que los bosques dejan de proveer de manera inmediata y mientras ocurre su restauración. La pérdida en la oferta maderera fue estimada a partir de una valoración de mercado; mientras que servicios como la regulación del clima, recursos genéticos, manejo de la tierra para recreación y control de la erosión, entre otros, se realizó mediante una valoración por transferencia de beneficios.
La manera como se cuantifican los impactos en este documento es innovadora, porque permite aislar el efecto del fenómeno El Niño de otro tipo de eventos de carácter macroeconómico que ocurrieron durante el año analizado (i.e. devaluación del peso, incremento de la inflación, etc), y además incorpora en la valoración final las pérdidas económicas ambientales causadas por los incendios forestales.
Este documento, además de la introducción, contiene siete secciones. La segunda presenta las generalidades sobre la variabilidad climática y el fenómeno El Niño en Colombia. La tercera menciona el contexto económico de Colombia para el periodo 2015. La cuarta expone la metodología desarrollada para estimar los impactos de futuras sequías en el país. La quinta y la sexta presentan los resultados y las conclusiones respectivamente. Finalmente, la séptima aborda las recomendaciones de política que se derivan de este ejercicio.